Cromoterapia en la ducha como mejora de tu bienestar

Existe un amplio abanico de métodos que nos permiten encontrarnos mejor con nosotros mismos, como por ejemplo el ejercicio, el mindfulness o las técnicas de relajación. Un recurso cada vez más presente en centros wellness es la ducha de cromoterapia, un baño de luz LED con capacidad para influir sobre el estado de ánimo y que está demostrando ofrecer excelentes resultados si se integra en la rutina diaria de cualquier persona.

¿Qué es la cromoterapia en la ducha y cómo funciona?

La cromoterapia en la ducha es una terapia de luces LED de colores que se realiza durante el baño con el objetivo de influir de forma positiva sobre el bienestar emocional y físico mediante vibraciones lumínicas muy concretas.

Esta ducha emocional funciona de forma sencilla, pues basta con instalar cabezales o tiras LED que proyecten diferentes tonos en función de lo que se desee estimular o equilibrar.

Cada color vibra a una frecuencia determinada, lo que hace que tenga un efecto muy distinto en el organismo, lo que permite estimular hormonas y equilibrar emociones muy específicas. Por ejemplo, el azul calma, el verde equilibra y el rojo activa. Se recomienda una ducha pausada, y combinar agua con color para conseguir sensaciones relajantes o revitalizantes.

Esto, sencillo a la par que efectivo, está haciendo que los spas wellness con cromoterapia estén experimentando una alta afluencia de visitas en comparación con los que no cuentan con este tipo de tecnología sensorial.

Colores y sus efectos emocionales: guía práctica

La terapia de color en la ducha ofrece múltiples posibilidades según el color elegido en cada momento pues, cada uno está ligado a distintos efectos emocionales.

• Rojo: Transmite energía y vitalidad, lo que le permite estimular la circulación y combatir la apatía. Es perfecto por las mañanas o en cualquier momento del día en el que se busque motivación.
• Amarillo: Fomenta alegría, optimismo, mejoras en los procesos digestivos y combate estados de decaimiento o depresión ligera.
• Naranja: Invita al crecimiento emocional y físico, aumenta la energía, alivia el cansancio e impulsa la actividad mental.
• Azul: Relaja, pues tiene el poder de reducir la ansiedad, facilitar la desconexión mental y mejorar la calidad del sueño.
• Verde: Es un símbolo de equilibrio y calma que ayuda a reducir el estrés, estabiliza las emociones y propicia la armonía interna.
• Violeta: Propicia la calma emocional y es capaz de aliviar tensiones profundas e incluso el insomnio.

Beneficios de incorporar la cromoterapia en tu rutina diaria

Incorporar la terapia cromática en el día a día de una persona convierte la ducha en un espacio de bienestar diario que va más allá de la higiene, que potencia el equilibrio emocional, la energía y el descanso de forma natural y accesible.

• Disfrutar de una ducha cromática con colores como el azul y verde favorece la relajación, aliviando tensiones acumuladas y mejorando el sueño nocturno, algo que contribuye a mejorar el estado emocional.
• Una sesión de colorterapia con tonos cálidos como el rojo, el naranja o incluso el amarillo estimula la energía y la motivación, elevando el ánimo y aumentando la actividad y el positivismo.
• La ducha con cromoterapia por las noches con tonos fríos generan señales al sistema nervioso que permiten conciliar el sueño de forma rápida y efectiva.
• Esta combinación de luz, agua y color convierte este tipo de ducha sensorial en un momento consciente, lo que se refleja de forma muy positiva en la percepción que se tiene del propio cuerpo.
• Además, ya hemos mencionado que la terapia cromática estimula hormonas e influye de forma positiva sobre los niveles de estrés.

Cómo elegir e instalar tu sistema de cromoterapia en la ducha

Elegir un sistema de cromoterapia para la ducha adecuado implica valorar la calidad del producto, la seguridad eléctrica en zonas húmedas, su facilidad de uso y también su consumo energético.

Fíjate especialmente en qué tecnología LED utiliza, su certificación IP para agua, compatibilidad con la instalación de la que ya dispones en tu centro wellness y en si permite cambiar de color fácilmente.

En cuanto a su instalación, estos son los pasos más importantes a seguir.

1. Asegúrate de contratar los servicios de un electricista autorizado y de que tu sistema soporta el volumen necesario.
2. Comprar un cabezal o panel adecuado y verificar que queda instalado tal y como especifican las instrucciones del fabricante.
3. Comprobar que la instalación eléctrica es segura.
4. Probar que todo funciona como debe.

Si tienes dudas, en Fluidra podemos asesorarte para que elijas siempre la mejor opción.

Consejos para sacar el máximo partido a tu sesión

Para disfrutar plenamente de una ducha con cromoterapia es necesario preparar bien el entorno y adquirir ciertos hábitos que potencien sus beneficios físicos y emocionales desde el minuto uno.

• Elegir el color adecuado según tu objetivo.
• Combinar el baño de luz LED con música y respiración relajada para intensificar el efecto de equilibrio.
• Ducharte con agua templada, evitando extremos de calor o frío para facilitar la absorción sensorial del color y evitar distracciones.
• No exceder los 5 o 10 minutos de duración de la terapia de color en la ducha, tiempo más que suficiente para que la cromoterapia actúe sin fatigar la piel ni interrumpir tu rutina diaria.
• Termina en silencio o con una meditación breve.

Con esto conseguirás que tu sesión de cromoterapia en la ducha se convierta en una experiencia totalmente transformadora, ¡no esperes más para probar esta experiencia!