La haloterapia, también conocida como terapia de sal, es un tratamiento natural que consiste en respirar aire seco cargado de micropartículas de sal en espacios acondicionados, como las llamadas cuevas de sal. Se utiliza principalmente como terapia complementaria para mejorar problemas respiratorios (como el asma o la rinitis), afecciones dermatológicas y el bienestar general. Su origen se remonta a las minas de sal del este de Europa, donde se observó que los mineros sufrían menos enfermedades pulmonares. Hoy en día, la haloterapia se ha popularizado en spas y centros de bienestar por sus posibles beneficios terapéuticos y relajantes.
Sumérgete más con nuestro Ebook


La haloterapia es un tratamiento que se realiza en salas especialmente diseñadas para ello, en las que un halogenerador dispersa, micropartículas de cloruro de sodio de calidad farmacéutica. Ahora bien, ¿qué esperar en haloterapia? Al inhalar el aire salino que se genera, las vías respiratorias se limpian y favorecen los procesos regenerativos en la piel, aprovechando las propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y antimicóticas de la sal.
Esta terapia natural tiene su origen en las cuevas de sal naturales de Europa del Este, pero el avance de la técnica nos ha permitido replicarla en entornos controlados. Sigue leyendo para descubrir más sobre las saunas de sal y las ventajas para la salud de una experiencia de haloterapia.
Beneficios respiratorios de la haloterapia
Una sesión de haloterapia se basa en la inhalación de sal seca, un elemento que tiene efectos muy positivos sobre el sistema respiratorio, ya que puede resultar muy positivo para algunas complicaciones respiratorias.
- Disuelve y elimina mucosidades, pues las micropartículas salinas adelgazan el moco, facilitando su expulsión por los cilios respiratorios y liberando las fosas nasales y los bronquios.
- La acción antiinflamatoria de la sal ayuda a reducir la hinchazón de las vías respiratorias en personas con asma o bronquitis.
- También es positiva la haloterapia para alergias, ya que puede mejorar síntomas de rinitis, alergias estacionales y sinusitis porque limpia contaminantes y agentes víricos o bacterianos.
- Los pacientes con problemas como Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), fibrosis quística o bronquitis crónica sienten cómo sus síntomas se reducen tras sus sesiones de haloterapia respiratoria.
Efectos sobre la piel y el bienestar cutáneo
La exposición controlada a micropartículas de sal también tiene efectos sobre la epidermis, lo que convierte a la haloterapia para la piel en un tratamiento muy solicitado por sus grandes beneficios.
- El cuerpo drena agua hacia la superficie cutánea para diluir la sal, lo que deja la piel más turgente, suave e hidratada tras la sesión.
- Las propiedades antiinflamatorias de la sal alivian la sintomatología de problemas como la dermatitis, la psoriasis o los eczemas, reduciendo picores, enrojecimiento e hinchazón.
- La sal también contribuye a eliminar patógenos de la piel, lo que la convierte en un gran apoyo para la recuperación de lesiones infecciosas y evitando además complicaciones con el acné o posibles heridas.
- El cloruro de sodio permite recuperar el equilibrio ácido de la piel, que refuerza su función barrera y reduce la sensibilidad y los brotes cutáneos.
- Además, este elemento aumenta la elasticidad y la firmeza de la piel, favoreciendo la renovación celular y la eliminación de arrugas.
Haloterapia como antiestrés: desconexión total
Entre los beneficios de la haloterapia también está el hecho de que crea un ambiente tranquilo, libre de estímulos externos, lo que convierte a la haloterapia para el estrés en una excelente forma de alcanzar un nivel de relajación óptimo.
Gracias a la atmósfera meditativa que se respira en las saunas de sal y a la respiración profunda en aire salino, es posible activar el sistema nervioso parasimpático y reducir el cortisol.
La inmersión en un espacio libre de dispositivos electrónicos, con luces tenues y música relajante, unida a la exposición directa a las micropartículas de sal, hace que el grado de relajación mental que puede alcanzarse sea máximo.
A esto contribuye el hecho de que la inhalación facilita una respiración más lenta y profunda, lo que desencadena una gran sensación de calma, mejora el ánimo, reduce la fatiga y favorece el descanso nocturno.

¿Cómo es una sesión típica de haloterapia?
Ya hemos dado algunos detalles sobre cómo funciona la haloterapia, pero aun así hemos elaborado una breve guía que te permitirá comprenderlo mucho mejor.
- Es recomendable llegar alrededor de 15 minutos antes, con una buena hidratación y habiendo tomado una comida ligera, y ponerse cómodo en la zona de haloterapia.
- Un halogenerador muele sal farmacéutica en micropartículas, que comienzan a dispersarse en el aire de la sala.
- Durante la sesión de haloterapia, de entre 30 y 45 minutos, se respira con normalidad, manteniendo la mente alejada de estímulos y problemáticas del mundo cotidiano.
- Una vez concluida la experiencia de haloterapia, es posible padecer una leve tos productiva, que es pasajera, así como sentir que se respira mucho mejor y se disfruta de una relajación profunda.
Contraindicaciones y recomendaciones
Este tratamiento suele ser bien tolerado por la mayoría de las personas, pero existen algunas contraindicaciones de la haloterapia que hay que conocer antes de iniciarla.
- Se desaconseja asistir si se está enfermo o se tiene fiebre para evitar estrés y posibles contagios.
- La deshidratación y el ambiente salino pueden agravar las sensaciones de personas con hipertensión, enfermedad renal o cardiovascular.
- No es recomendable para personas con heridas abiertas o tuberculosis activa, pues existe riesgo de irritación o diseminación de gérmenes.
- Tampoco para personas con piel extremadamente sensible o ciertos problemas dermatológicos, ya que la sal puede resecar o irritar en casos de eccema severo o dermatitis aguda.
En todos estos casos, lo mejor es consultar con un profesional sanitario antes de someterse a una experiencia de haloterapia.
Saunas y cabinas de sal para haloterapia
Las saunas o cabinas de sal que ofrecemos en Fluidra son espacios climatizados que incluyen una o varias paredes recubiertas con ladrillos de sal del Himalaya, lo que propicia un ambiente perfecto para la haloterapia.
En su interior se alcanzan temperaturas de entre 48°C y 75°C, y una humedad relativa controlada de entre el 20% y el 50%, lo que favorece la ionización natural de la sal. Por otro lado, el calor activado energiza los iones negativos de la sal, lo que potencia aún más los beneficios de la haloterapia tanto a nivel respiratorio como inmunitario.
En Fluidra somos expertos en este tipo de equipamiento, por eso disponemos de cabinas de sal, muros de sal retroiluminados, halogeneradores de última generación y todos los elementos que necesitas para ofrecer un servicio de haloterapia de alta calidad en tu centro wellness. Además, ofrecemos total personalización estética y funcional para adaptar cada solución al estilo y necesidades de tu espacio. Consulta con nuestros expertos, te contarán todo lo que necesitas saber sobre esta opción cada día más demandada por tus clientes.