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La temperatura del agua de una piscina es fundamental para asegurar el placer y la comodidad de los usuarios. Por lo tanto, la elección del sistema adecuado de gestión de la temperatura del agua es una decisión clave que puede ayudar a los propietarios a optimizar la sostenibilidad y el rendimiento económico de su piscina.

Pero, ¿qué es exactamente una manta térmica y cómo funciona? ¿Cómo pueden los operadores elegir la manta térmica que mejor se adapte a sus necesidades, ya se trate de un club deportivo, una instalación de competición o una piscina comercial? En este artículo explicamos qué debe tenerse en cuenta.

¿Qué es una manta térmica?

Una manta térmica es un sistema específicamente diseñado para evitar la pérdida de calor del agua de la piscina, de este modo se mantiene la instalación de agua caliente cuando no se utiliza. Instalada en el interior o en el exterior, una manta térmica minimiza la evaporación del agua, que representa la principal fuente de pérdida de recursos y de energía en una piscina.

A medida que el agua se va evaporando, hay que añadir agua caliente para compensar y mantener el nivel del agua, con lo cual se utiliza una gran cantidad de energía para calentar el agua. Para evitarlo, una manta térmica incorpora bolsas de aire que ayudan a reducir la pérdida de calor y lo atrapan debajo. Esto es particularmente útil en piscinas que incluyen un sistema de calentamiento del agua.

Asimismo, en las piscinas al aire libre, una manta térmica capta la radiación solar y transfiere esta energía al agua, de esta forma se calienta y se evita la pérdida de calor. En consecuencia, la instalación de una manta térmica permite disminuir significativamente los procesos de evaporación del agua, gestionar eficazmente la temperatura del agua y, en última instancia, reducir los costes de calentamiento de la piscina.

Características de las mantas térmicas para piscinas comerciales

Las instalaciones de piscinas comerciales, como de clubes deportivos, piscinas municipales o piscinas de competición, pueden beneficiarse de la instalación de mantas térmicas de espuma. Este modelo incluye las siguientes características:

  • Puede instalarse en una piscina de nueva construcción o adaptarse a una piscina existente, mejorando su eficiencia.
  • En el caso de piscinas climatizadas se recomienda un espesor nominal de 5 mm, tanto en instalaciones estándar como de gran tamaño. No obstante, este espesor puede revisarse para adaptarse a necesidades climáticas específicas, teniendo en cuenta las diferentes temporadas de baño.
  • Las dimensiones y la forma de una manta térmica pueden variar según cada piscina y son personalizables.
Tipos de mantas térmicas para piscina y cómo elegir la adecuada

Las mantas térmicas para piscina pueden ser automáticas o manuales, dependiendo del tipo de rodillo utilizado en su diseño. Un sistema automático es más fácil de manejar y se puede cubrir y descubrir la piscina con facilidad con solo pulsar un botón. Por lo tanto, se recomiendan para piscinas grandes e instalaciones comerciales, en los que un sistema manual puede presentar problemas operativos.

Las soluciones personalizadas también son una posibilidad para los propietarios de piscinas comerciales que se plantean la cuestión de qué sistema puede funcionar mejor para su instalación. Estos sistemas a veces incorporan motores de corriente continua, así como ejes de acero inoxidable, que deben estar diseñados y fabricados en cumplimiento con las normas de la industria correspondientes.

¿De qué están hechas las mantas térmicas para piscinas?

Si se tiene en cuenta que el objetivo principal de una manta térmica es evitar la evaporación del agua y la pérdida de calor, la elección del material adecuado es crucial para garantizar que el sistema cumpla con su objetivo. Las mantas térmicas para piscinas comerciales suelen estar hechas de polietileno, un polímero termoplástico que tiene una estructura cristalina variable con baja conductividad térmica. Además, para mejorar su capacidad térmica, normalmente están laminadas con una espuma de polietileno azul curada por radiación con una película de polietileno en relieve por debajo.

Beneficios de las mantas térmicas para piscinas

Eficiente y sostenible

Instalar una manta térmica minimiza significativamente el proceso de deshumidificación y reduce la pérdida de calor derivada de la evaporación del agua hasta en un 80%. Independientemente del tipo de sistema de calentamiento instalado, la incorporación de una manta térmica se traduce en importantes ventajas de rentabilidad y sostenibilidad, minimiza los nuevos aportes de agua y la energía necesaria para calentar las piscinas y reduce el impacto ambiental de la instalación.

Las mantas térmicas para piscinas también pueden suponer beneficios adicionales para las instalaciones que utilizan un sistema de desinfección química. A medida que se reduce la evaporación, los propietarios de las piscinas también pueden disminuir la cantidad de productos químicos que se utilizan para la desinfección.

Comodidad

Mantener una temperatura del agua agradable es fundamental para que los usuarios de la piscina disfruten de un buen baño. Una manta térmica ayuda a los operadores de la piscina a mantener la temperatura del agua en el nivel deseado, mejorando el confort.

Facilita el uso y el mantenimiento de la piscina

Una manta térmica también reduce los costes de filtración, ya que impide que la suciedad y los escombros caigan al agua. Las mantas ligeras y las que vienen con un sistema enrollable simplifican aún más el proceso. La elección de una manta térmica rápida y fácil de usar puede marcar la diferencia.

Adaptable, rápida de instalar y duradera

Las mantas térmicas se adaptan fácilmente a diferentes tamaños y espacios de piscinas. Además, están fabricadas con componentes prefabricados, lo que reduce considerablemente el tiempo de instalación y minimiza las interrupciones del servicio. Una manta térmica adecuada también será duradera: en primer lugar porque el polietileno es un material plástico muy fiable; y, en segundo lugar, porque las bolsas de aire están especialmente diseñadas para resistir el contacto con la superficie del agua.

Manta térmica para piscinas: principales aplicaciones para diferentes instalaciones

Piscinas de competición

Las piscinas de competición suelen estar situadas en lugares espaciosos, lo que significa que existe un riesgo considerable de que la suciedad y otros objetos contaminen el agua de la piscina. La instalación de una manta térmica garantiza que la instalación estará protegida frente a estos problemas, además de reducir la evaporación y mantener la temperatura del agua.

Clubes deportivos

Con la instalación de una manta térmica los clubes deportivos verán reducidos los costes y el consumo de recursos. Asimismo, a medida que mejora el impacto ambiental de las instalaciones, los operadores de clubes deportivos pueden aprovechar la oportunidad para integrar una narrativa de sostenibilidad en su imagen de marca.

Piscinas públicas

La reducción de los costes energéticos y de mantenimiento que se consigue con las mantas térmicas es clave para garantizar que las piscinas públicas sigan siendo una instalación viable y económicamente eficiente para las comunidades. Con ello se puede incentivar la transparencia de las entidades públicas y potenciar su camino hacia prácticas sostenibles.

Piscinas privadas y otras opciones

La instalación de una manta térmica en una piscina privada representa una oportunidad para recortar gastos de una manera fácil y eficiente. También facilita y abarata el mantenimiento, de esta forma mejora la satisfacción de los propietarios con la instalación.

Lograr que la posesión de una piscina sea sencillo y sostenible

Una manta térmica es una inversión inteligente para los propietarios y operadores de piscinas, que verán cómo sus costes y consumos energéticos se reducen notablemente. La reducción de la pérdida de calor por evaporación, la disminución de la deshumidificación, la reducción de nuevos aportes de agua, así como de la suciedad y las impurezas que se infiltran en el agua son solo algunos de los beneficios principales.

Para garantizar que su inversión sea sólida, los propietarios y operadores de piscinas deben contar con especialistas en instalaciones de piscinas de confianza y con experiencia. Dicho equipo garantizará que la manta térmica cumpla con las normativas nacionales obligatorias (como las normas RITE en España, que incluye la normativa sobre construcción de aparatos de calentamiento), además de diseñar un sistema que se adapte a las necesidades de cada piscina. Con estas herramientas podemos tener la seguridad de que el retorno de la inversión se maximizará desde todas las perspectivas.

 

Por qué una manta térmica es la solución para una gestión eficiente de la temperatura